Trabajo en equipo al estilo ZKW: humanos y robots trabajan mano a mano
El proveedor de automóviles ZKW marca un hito en la producción: robots colaboradores interactúan directamente con el personal de producción durante el montaje de las tiras luminosas de los faros.

Trabajo en equipo al estilo ZKW: humanos y robots trabajan mano a mano
Después de aproximadamente un año de desarrollo y optimización, el programa ZKW COBOT ya está disponible. El robot colaborativo trabaja junto con el personal de la línea de producción. Mientras que los robots industriales se utilizan en su propia celda protegidos detrás de estructuras protectoras o puertas de seguridad, el ZKW COBOT permanece libre e interactúa con el operador. La máquina inteligente se utiliza actualmente para ensamblar barras de luces de faros.
Las primeras experiencias son prometedoras: el trabajo en equipo con el robot inteligente facilita el arduo trabajo manual de los empleados en la línea de montaje, acelera el proceso de montaje en aproximadamente un 20 por ciento y garantiza una alta calidad de producción constante. "El proyecto COBOT se centra en la eficiencia, la seguridad y la calidad. El robot colaborativo debe ayudar especialmente a nuestros empleados en la producción", afirma Oliver Schubert, director general del grupo ZKW.
El desafío particular del proyecto COBOT no fue sólo la implementación de los requisitos tecnológicos de proceso necesarios, sino también los requisitos relacionados con la seguridad. La aplicación robótica automatizada debía poder utilizarse sin ningún recinto protector, valla de seguridad o rejilla fotoeléctrica. El requisito para el robot colaborador era atornillar nueve tornillos en un listón de faro en un tiempo de ciclo máximo de 70 segundos y respetando las directrices de seguridad para la colaboración entre humanos y robots. El operador introduce manualmente la tira de luz en el soporte previsto. Después de arreglar el componente, el operador da permiso para que el robot funcione mediante un botón. Mientras el operador coloca manualmente componentes adicionales, el robot se mueve a las diferentes posiciones de los orificios de los tornillos y atornilla los tornillos automáticamente.
Seguridad ante todo
El mayor desafío al programar el COBOT fue garantizar la seguridad del personal operativo. "Hemos analizado y evaluado con precisión los posibles puntos peligrosos y los hemos implementado en un concepto de seguridad, por ejemplo mediante un husillo móvil. Si, por ejemplo, los sensores del robot o el husillo detectan resistencia o colisión durante el movimiento, los sensores transmiten esta información a la seguridad del robot y al control PLC. El COBOT se detiene o evita inmediatamente. Un robot industrial normal no puede hacer esto", afirma Christian Blamauer, director del proyecto ZKW COBOT. Hacer muescas en la boquilla del husillo requiere muy poca fuerza. El sistema puede detectar y desactivar inmediatamente cualquier colisión que pueda ocurrir entre, por ejemplo, el husillo, el dedo y la tira de luz. Este desarrollo también fue presentado a la Oficina Europea de Patentes. El empleado de ZKW que trabaja con el COBOT confirma también que el sistema ha demostrado su eficacia en la práctica: "No necesito comprobar el funcionamiento del COBOT, confío plenamente en el robot. Formamos un buen equipo, me ahorro el arduo atornillado manual de los tornillos".
Los beneficios de la colaboración entre humanos y robots superan los costos de inversión. La colaboración entre humanos y robots ayuda a aumentar la eficiencia de la fabricación. Porque los robots y los operadores trabajan en paralelo. Además, la calidad se puede garantizar aún más gracias al mayor nivel de automatización. El escáner integrado registra el número de serie de cada componente. Esto facilita el seguimiento de lotes defectuosos. “En el futuro, el COBOT podría respaldar otros pasos de trabajo en la producción, como por ejemplo el manejo de componentes”, afirma Oliver Schubert.